Sin duda, la sesión de subidas vista ayer en los parqués europeos sirve para mantener vivo el rebote que los principales índices del Continente desarrollan en el muy corto plazo. Sin embargo, la volatilidad vista a lo largo de la jornada y ciertos detalles técnicos -el Ibex no consiguió al cierre aproximarse a los máximos de la sesión anterior- provocan que los alcistas aún tengan que ir con pies de plomo en el mercado.
La jornada vino marcada por la publicación de la tasa de inflación en el mes de enero en EEUU, que fue del 2,1%, es decir, mayor a la esperada por el mercado. Esto favorece un escenario en el que la Reserva Federal (el banco central estadounidense) se vea obligada a subir tipos a un ritmo mayor del previsto inicialmente con el objetivo de controlar los precios, algo que teme el mercado.
Pese a ello, Wall Street logró transformar las dudas iniciales en ganancias que superaron el 1%, algo que se transmitió a las bolsas del Viejo Continente.
Sea como sea, "para que el Ibex aleje el riesgo de asistir a una continuidad bajista es preciso que el rebote que se inició el lunes consiga cerrar el último de los huecos que se generaron en la última caída, para lo cual debería cerrar una sesión por encima de los 10.065 puntos", asegura Carlos Almarza, analista técnico de Ecotrader.
Es decir, al Ibex, aún le queda subir más de un 3,5% para dar por confirmado el fin de la continuidad bajista de las últimas semanas. Y es que, el selectivo español es uno de los más débiles dentro del panorama europeo.
En Europa, por su parte, que el rebote pueda seguir ganando altura depende del mantenimiento de los mínimos de ayer y también del cierre del último de los huecos que abrieron en la caída: se deben superar los 3.478 puntos del EuroStoxx 50.
Eso sí, en su ataque a estas cotas, los selectivos europeos deberán lidiar con un euro que ha vuelto a coger fuerza en su cruce frente al dólar. Tras sumar su cuarta sesión consecutiva al alza, la moneda única ya repunta un 1,7% desde los mínimos del mes y ya se encuentra a menos de un 0,5% de los altos del año, marcados en los 1,251 a cierre de una sesión.
"A corto plazo estamos viendo un rebote que por el momento ya ha servido para recuperar el 61,8% de la última caída", asegura Almarza. "Para hablar de fortaleza en el rebote y valorar una vuelta a los altos del año en 1,25 es preciso que supere los 1,24-12420 dólares por euro", concluye el experto.