No hay duda, las subidas de la divisa común frente al resto de monedas más negociadas del mundo es uno de los principales factores que ha contribuido a los erráticos movimientos de la bolsa europea en las últimas semanas.
Sólo en el mes de noviembre, el euro se ha apreciado más de un 2,5% frente al billete verde estadounidense. Un movimiento que ha venido acompañado de una caída similar del principal selectivo de renta variable (EuroStoxx 50) en el mismo periodo de tiempo y que ha costado ya, más de 78.000 millones en capitalización a las firmas que componen el selectivo.