Esta semana se ha publicado un buen dato de ventas minoristas y de importaciones demostrando que el consumo empieza a volver a tirar en el gigante asiático. En España hay muchos fondos que pueden sacar partido de una economía china basada más en la demanda interna que en las exportaciones.
Hace apenas un año China se situaba en el foco del mercado debido a la sorprendente y agresiva devaluación de su divisa, el yuan, lo que provocaba uno de los mayores crashes del mercado de los últimos años. Un año después la situación en este país y en el resto de emergentes ha dado un giro radical y de hecho se han convertido en uno de los destinos favoritos de los inversores gracias al Brexit. Lo muestra la última encuesta a gestores que ha publicado Bank of America Merrill Lynch, que cifra en un 24 por ciento la sobrepondración que tienen los mercados emergentes en sus carteras, el dato más alto de los últimos tres años y medio.