Las bolsas estadounidenses han terminado julio con subidas, muy cerca de máximos históricos en los principales selectivos del país, a pesar de que los avances han sido inferiores a las que han registrado las principales plazas europeas, después de conocerse a finales de junio la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea. Las reuniones de la Reserva Federal y el Banco Central Europeo han sido importantes, lanzando un mensaje de tranquilidad tras el 'Brexit'.
Julio arrancaba con malos augurios para la renta variable, tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Sin embargo, la situación no ha podido ser más diferente, ya que las bolsas de los países desarrollados han terminado el mes con avances generalizados, más fuertes en el Viejo Continente que en Estados Unidos. Pero, eso sí, el S&P 500 ha terminado el viernes rozando máximos históricos, un hito que consiguió alcanzar a mitad de mes. El Nasdaq 100 termina en máximos del año, mientras el Dow Jones industrial, de forma similar al S&P, ha acabado por debajo de sus altos históricos que se tocaron pocas semanas atrás.