El mercado se mueve al son de las negociaciones entre Grecia y las instituciones europeas. Lo que un día son subidas al calor de un posible acuerdo, otro son bajadas por el temor a entrar en terreno desconocido en caso de que se produzca el Grexit. Blindar la cartera por completo es imposible, pero sí puede protegerla con fondos que sean menos volátiles que el mercado.
Con independencia de cómo terminen las negociaciones -que quedarán aplazadas hasta el lunes, que será cuando Alex Tsipras acuda a Bruselas con el resultado del referéndum bajo el brazo-, Grecia ha borrado hasta la fecha casi la mitad de las ganancias que consiguen las bolsas europeas en el semestre, aunque ayer volvieron a alejarse de soportes clave. En cualquier caso, una vía para evitar sustos es elegir fondos de inversión menos sensibles a los movimientos del mercado, es decir, que presenten una beta inferior a uno. Lo que significa que, en caso de caídas en bolsa, el fondo caerá menos que el mercado (y viceversa, también es aplicable a las subidas).
En palabras de Fernando Luque, analista senior de Morningstar, "la beta compara la variabilidad de la rentabilidad de un fondo comparada con la variabilidad de su índice de referencia". De manera que en mercados alcistas los fondos con beta superior a uno suelen ser los mejores aliados de quienes quieren amplificar los movimientos de las bolsas y aspiran a ganar más; mientras que en momentos bajistas las betas por debajo de uno pueden ser las mejores aliadas de quienes quieren vivir tranquilos.
En el entorno actual, en el que las bolsas europeas miran preocupadas el desenlace de la crisis helena, existen ciertos fondos de inversión que buscan oportunidades en el Viejo Continente más defensivos, que presentan betas inferiores a uno (ver gráfico).
De todos -entre los que tienen un patrimonio superior a los 100 millones de euros y una inversión máxima de 10.000 euros-, el menos volátil es el MFS® Meridian Europ Sm Cos A1. Invierte en pequeñas y medianas empresas europeas relacionadas sobre todo con el consumo cíclico y defensivo, ambos representan un 41,25% de su cartera. Con un peso destacado de Reino Unido, este producto, que reúne la máxima calificación crediticia por parte de Morningstar, consigue una rentabilidad anualizada del 12% a diez años y está disponible a partir de una participación de 4.000 euros.
Más asequible es LO Funds - Europe High Conviction R A, ya que requiere un mínimo de 1.000 euros y además cuenta con cuatro estrellas Morningstar. A diferencia del anterior, este fondo se posiciona sobre todo en el sector industrial y en el tecnológico decantándose más por empresas de gran capitalización -donde tiene un 47,46% de su portfolio-. También gana menos que el anterior a largo plazo: un 7,45% anualizado a una década.
Menos recorrido -por eso de que nació en 2013- tiene el fondo de Natixis, el Seeyond Europe Mini Variance R/A. No precisa de inversión mínima y es el tercero menos volátil. Su filosofía es buscar empresas de gran capitalización de crecimiento y entre sus primeras posiciones figuras empresas de la talla de Fresenius o Nestlé. A tres años, donde ya tiene track record, este fondo consigue un rendimiento anualizado del 16,8%. Pero eso sí, también posee la comisión de gestión máxima más elevada de los anteriores, del 1,8%.
A corto plazo, eso sí, los productos más rentables en lo que va de año son Oddo Avenir Europe CR-EUR y Echiquier Agenor, que avanzan más de un 21% en el año (ver gráfico). Los dos aplican las comisiones de gestión máximas más altas.