¿Ver la 'guerra inmobiliaria' desde la barrera o entrar a tomar parte de ella? Ésa es la cuestión. Por técnico, Quabit es la única compañía que está al alcance.
No hay duda de que las aguas bajan 'revueltas' por el río del sector inmobiliario. La entrada de Villar Mir, presidente de OHL, en el capital de Colonial a finales de 2013, la venta por parte de la Caixa de un 3,19% que mantenía en ella o el interés que ha mostrado por Realia Amancio Ortega a través de Pontegadea, la inmobiliaria del principal accionista de Inditex, lo corroboran.
Y en medio de este lío en el que se mueven las protagonistas de este sector, hay algunas compañías que por técnico pueden presentarse como una oportunidad de compra de cara a tomar posiciones en un sector que parecía desterrado al olvido a lo largo de los últimos meses.
En este sentido Quabit (QBT.MC)sería quien se presentaría en un mejor aspecto técnico. Así lo afirma Joan Cabrero, analista de Ágora A.F. para Ecotrader, quién asegura que la firma que ahora preside Félix Abánades López está dando una señal de entrada a corto plazo.
"La firma está atacando -sin éxito por ahora- su resistencia a corto plazo, que está situado en el entorno de los 0,14 euros por título" señalaba el experto. "Por ello" prosigue Cabrero, "la superación de esta cota abriría las puertas a que se pudiera poner en marcha una estrategia alcista sobre ella, que tenga como stop tendencial los 0,11 euros por acción o los 0,10 euros de una manera más agresiva".
Por fundamentales, sin embargo, la cobertura de la que goza es muy baja. De hecho, según recoge FactSet y Bloomberg, no hay ninguna firma de inversión en la actualidad que emita una recomendación sobre qué hacer con sus títulos.
Y es que, este tipo de valores en España no viven especialmente una luna de miel con la banca de inversión, que no emite recomendaciones sobre si tomar posiciones en algunas de estas compañías o deshacerlas. De hecho, únicamente Realia y Colonial tiene un consenso de mercado suficientemente sólido, pero técnicamente están menos al alcance de la mano.
Por un lado, la curva de precios de Realia presenta una clara resistencia a la altura de los 1,40 euros por título. Por ello, "es conveniente esperar a que el precio de las acciones de Realia corrija hasta los 0,97 euros para tomar posiciones en ella", señala Cabrero. En caso de que se produzca este hecho, "la estrategia que debería abrirse en esta firma inmobiliaria debería disponer de un stop bajo los 0,73 euros por título", sentencia el experto sobre una firma que se está poniendo de moda.
El caso particular de Colonial
Era algo que el mercado esperaba. Numerosos analistas contemplaban la posibilidad de algo que finalmente se confirmó oficialmente a finales de 2013: Villar Mir, presidente de OHL, estaba negociando hacerse con un tercio de Colonial (COL.MC). Sin embargo, por muy anunciada que estuviera la noticia, los inversores lo celebraron en el mercado de renta variable por todo lo alto. "La sociedad está manteniendo diversas conversaciones de manera independiente con diferentes inversores al objeto de valorar un posible aumento de capital", afirmaba Colonial en un comunicado a la CNMV.
Desde entonces, la firma ha conseguido en bolsa un avance del 7% aproximadamente, hasta pagarse cada uno de sus títulos a 1,39 euros. Tal y como recoge FactSet, los analistas que la siguen recomiendan de manera unánime vender las acciones de esta compañía que ya supera en un 78% el precio objetivo que los expertos otorgan a sus acciones, que es de 0,78 euros.
Sin embargo Cuando parecía que el presidente de OHL ya tenía apalabrada la toma del control de Colonial, el fondo canadiense Brookfield, principal acreedor de la inmobiliaria, presentó una contraoferta con la que pretende reestructurar la deuda de Colonial -que según los analistas ascenderá hasta los 3.500 millones de euros en 2013- y a través de la cual se muestra dispuesta a lanzar una opa sobre la compañía.
Por técnico, Joan Cabrero afirma que una hipotética estrategia en Colonial escondería tanto potencial como riesgo por la imposibilidad de que se ponga un stop que nos permita salir de ella en caso de que las cosas no fueran como se esperaba. Pese a ello, "si la firma supera los 1,63 euros por acción y después confirma este avance con la superación de los 2,25 euros, se reforzaría un cambio de tendencia relevante que permitiría a quienes anhelen un mayor riesgo tomar posiciones en ella".