Desde comienzos de junio el EuroStoxx 50 está desarrollando un proceso lateral que está sirviendo para consolidar el fuerte ascenso que nació en los mínimos de marzo y que tiene como base y soporte la zona de los 3.000-3.050 y como techo y resistencia los 3.400 puntos.
Mientras la principal referencia europea no salga de este rango, el debate que protagonizan alcistas y bajistas se mantendrá muy igualado y podemos seguir viendo amplios vaivenes que si no tienen claro donde se encuentran pueden llevarlos a confusión.