Las principales bolsas europeas y norteamericanas tratan a corto plazo de desarrollar un rebote que sirva para recuperar parte de las últimas y fuertes caídas y mucho nos tememos va a ser muy vulnerable y previo a una nueva pata bajista.
Eso es, precisamente, la que esperamos que se desarrolle pacientemente para volver a comprar renta variable del mismo modo que recomendamos hacerlo a comienzos de junio.