La bolsa europea está viviendo su particular primavera y no termina de decidirse entre el calor del verano y el frío invernal. Mientras continúan los bandazos en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, las principales plazas del Viejo Continente siguen en tierra de nadie y ayer cotizaron con ligeros descensos "y no se aleja la posibilidad de que veamos una segunda pata de la corrección que se inició al final de abril en la zona de los 9.600 puntos del Ibex", explica Joan Cabrero, director de análisis de Ecotrader. | Análisis técnico: Vaivenes sin rumbo definido en las bolsas europeas
Después de tocar esos máximos anuales, el índice doméstico retrocedió hasta la zona de los 9.000 enteros, desde donde comenzó un rebote "que puede tener dificultades para sostener aunque todavía pueda alargarse un poco más", añade Cabrero.