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Los diez titulares que deja la bolsa española en el año que se va

28/12/2018 - 21:14
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El año que se despide este lunes ha dejado nuevas lecciones para los inversores, que han debido aprender, por ejemplo, que la banca española no remontará hasta que el BCE decida dar un paso adelante. Las grandes entidades del mercado asumen pérdidas del 34% para BBVA, un 28% cede Banco Santander y otro 20%, CaixaBank.

La opción alternativa es la que han tomado entidades como Unicaja y Liberbank, que negocian su fusión. Su objetivo es ser más rentables antes de lo que conseguirían si tuvieran que esperar a que el BCE suba el precio del dinero. Improbable hasta 2020 como pronto. La gran sorpresa entre las blue chips ha sido Iberdrola. Es el cuarto valor del Ibex más alcista -de los pocos que se salvan de las caídas- en 2018, con un avance del 7,8% gracias a que los inversores se han visto obligados a buscar refugio en el sector eléctrico ante las curvas del mercado. Una de las consecuencias de la incertidumbre que anticipa una ralentización en 2019 es que ha dejado a los inversores en el dique seco. Una decena de salidas a bolsa previstas este año al mercdo bursátil español, sobre todo del renovado sector inmobiliario, o se han cancelado, como en el caso de Azora o Haya Real Estate, o se han transformado bastante para pedir menos capital al mercado. Este es el caso de Testa Residencial, hoy propiedad de Blackstone, que optó por salir al MAB (Mercado Alternativo Bursátil) este verano en una OPV que se esperaba que alcanzara los 1.800 millones de euros. El ocaso de Dia, todavía sin resolver, dejaba, por otro lado, un asiento vacante en el Ibex 35, que ocupa Ence desde el lunes. Antes, en junio, llegó otra industrial, Cie Automotive, como primera automovilística del selectivo.

Alcanza la madurez de márgenes y llegan los sustos

El año que dejamos atrás pasará a la historia por ser el primero en el que Inditex reconoció abiertamente que su crecimiento ha tocado techo y ha entrado en una fase madura del negocio. Este fue el mensaje que hizo llegar a los analistas en febrero, mes en el que comenzó su caída en bolsa, hasta cerrar -a falta de la media sesión del lunes- con pérdidas del 23%. Este mensaje, traducido, implica que sus ventas seguirán creciendo, aunque no por encima del 10%, y que su margen ebit (beneficio antes de intereses e impuestos) caerá por primera vez por debajo del 17%.

Aun así, sigue siendo el más elevado del sector, doblando los de su competidor directo, la firma sueca H&M -en el 8% previsto en 2019- o de Fast Retailing, matriz de Uniqlo, que rozará el 12% el próximo año. Expertos como los de Bankinter reconocen que la textil ha aumentado su atractivo en bolsa tras las caídas, aunque todavía se pagan múltiplos muy elevados, considerando un recorte en su margen de beneficios. Inditex cotiza a un PER de 18 veces de cara a 2019, el mismo nivel que firmas de lujo como LVMH, Dior o Richemont.

El refugio entre las grandes con el mejor consejo en 3 años

El inversor ha recuperado su favoritismo por Iberdrola en tiempos difíciles. La compañía, cada vez menos eléctrica y más renovable, observa en la distancia cómo ha transcurrido un año especialmente nefasto para la bolsa española. Cinco utilities lideran el Ibex 35 en 2018, y la cuarta de ellas es la compañía capitaneada por Ignacio Sanchéz Galán, con un avance del 7%. De hecho, sus títulos cotizan al borde de los 7 euros por acción, zona de máximos anuales, y lo hace con la mejor recomendación de compra en los últimos tres años -también, de entre las blue chips del Ibex-.

De cara a 2019, su dividendo ofrece una rentabilidad superior al 5%, un punto a su favor en un año que se prevé volátil. Iberdrola tiene sobre la mesa un plan estratégico con objetivo a 2020 y los analistas creen que lo cumplirá con cierta holgura si mantiene el ritmo actual. 2018 lo cerrará con un beneficio de 3.000 millones, y alcanzará 3.370 milloens en 2020, un 3% por encima del objetivo que se ha marcado la compañía. El viento de cola que ha soplado desde EEUU ha sido el elemento clave para una firma que tiene allí -a través de Avangrid- el 21% de su ebitda. Otro 26% está en renovables.

Telefónica: Su acción despierta ante el ruido de nuevas fusiones

Los rumores sobre nuevos movimientos corporativos en el sector han levantando el ánimo, sobre todo, de Telefónica y también de sus homógolos en el último trimestre. La teleoperadora liderada por José María Álvarez-Pallete suma un 7% desde octubre, cinco puntos más que el sector europeo, aunque es insuficiente para maquillar pérdidas que superan el 10% en el año. Sin embargo, el momento para Telefónica es bastante alentador, según los analistas. En 2018, la compañía se ha colgado del cuello su mejor recomendación -con un consejo de mantener- desde 2011 y tiene por delante un potencial cercano al 10%, hasta los 8 euros que le dan como precio objetivo.

Eso sí, no ha escapado al recorte de estimaciones sufrido por el mercado. El beneficio de 4.000 millones de euros que se esperaba para 2019 a comienzos de año se retrasará hasta más allá de 2020, a pesar de que la firma mantiene su disciplina de reducir el endeudamiento, en ratios por debajo de las tres veces para los próximos ejercicios. El mercado descuenta ya posibles desinversiones que remen en esta dirección, como su negocio en Centroamérica y la eterna venta de O2.

BBVA: Supera la crisis mexicana para encallar en el cisma turco

BBVA sufre las mayores pérdidas de entre las tres grandes entidades nacionales y está en zona de mínimos de 2012, después de haberse dejado un 34% de su valor en bolsa en el año. Y eso que ha salido reforzado de la incertidumbre de las elecciones mexicanas de julio donde AMLO (Andrés Manuel López Obrador), candidato temido por los mercados, se hizo con la presidencia del país. México es su principal mercado, con el 28,1% de los ingresos con un margen bruto del 30% -el mayor del grupo, por encima del 25 de España-.

Seis meses después, el peso mexicano rebota un 5,3% frente al euro -se cambia a 22,54 pesos- y ha reducido a la mitad las pérdidas anuales que llegaron a ser del 10%. El problema es que se abrió también el melón turco -Garanti supone un 16,3% para la entidad- y provocó el desplome de la lira. La perspectiva es que BBVA gane 4.600 millones en 2019, un 11% menos que este año.

Dia: El inversor pierde un 90% y todavía falta la ampliación

Si el Banco Popular monopolizó la atención en 2017, Dia ha sido quien lo ha hecho en 2018. La cadena de distribución ha presentado un profit warning (rebaja de estimaciones), reconocido varios agujeros contables en sus cuentas, aprobado una ampliación de capital por 600 millones de euros -el doble de lo que capitaliza-, ha sido expulsada del Ibex, ha renovado dos veces a su consejero delegado y hoy vive pendiente de cerrar un acuerdo de refinanciación y de presentar su plan estratégico.

Y lo mejor de todo es que la gran mayoría de estos escándalos se han producido en menos de un trimestre, por no mencionar las dudas que existen sobre la responsabilidad de su primer accionista, Letterone, en la caída de la acción. Dia es de manera consecutiva la firma más acechada por los cortos desde el año 2015. Este ejercicio lo cierra con un 15,5% del capital en sus manos y la última hora pasa por refinanciar su deuda y presentar al mercado un plan creíble que le haga remontar el vuelo el próximo año después de haber perdido más del 90% de su valor en bolsa en doce meses. La banca ultima un préstamo de 200 millones para evitar que la compañía entre en quiebra técnica.

Metrovacesa: Única gran salida del año hasta que el mercado se secó

Metrovacesa encarna a la perfección cómo se han enfriado las estimaciones para el sector inmobiliario nacional desde mediados de año. Volvió a cotizar el pasado mes de febrero, con serias dudas sobre su cartera de activos compuesta por suelos de primer nivel pero también por otros de segunda categoría repartidos a lo largo de toda la geografía española. Esto era algo novedoso teniendo en cuenta que le antecedieron otras dos promotoras, Neinor y Aedas Homes, cuyas carteras se habían construido en plena crisis a base de suelo de primera calidad. Desde su OPV, Metrovacesa acumula pérdidas del 30%, lo que le ha llevado a cotizar con un descuento sobre el valor neto de sus activos (NAV, en sus siglas en inglés) cercano al 40%, el mayor de las tres promotoras.

Y por delante el futuro es incierto. Está en la picota el objetivo de que el sector venda 150.000 viviendas de nueva construcción en torno al año 2021. Por el momento, Metrovacesa lo único que reconoció hace unos meses es una rebaja de sus previsiones en cuanto a la entrega de viviendas en 2020 y 2021, aunque a un precio superior, con lo que niega que vaya a tener un impacto negativo en sus beneficios.

Unicaja y Liberbank: Las fusiones en el mapa bancario se reactivan en 2019

Antes incluso de que Unicaja pusiera un pie sobre el parqué madrileño ya se rumoreaba con la posibilidad de que el precio que se pagaba por ella descontara, en parte, una futura operación corporativa. Hace un par de semanas Unicaja y Liberbank dieron a conocer que estaban en conversaciones para fusionar y dar lugar a una entidad mucho mayor y, sobre todo, más rentable en vista de que el Banco Central Europeo (BCE) no llevará los tipos de interés a tasas relevantes -más allá del 0,1% que se espera para finales de 2019- hasta bien entrado 2020 o 2021.

El conflicto surge en el reparto de responsabilidades en la nueva entidad, ya que Liberbank no parece dispuesta a asumir que su homóloga malagueña, tanto por activos, como por capitalización, podría representar una mayoría (del 60%) en la entidad resultante. Es por ello que fuentes del mercado siguen hablando de otra posibilidad: que Unicaja sea adquirida por una firma mayor, como CaixaBank. Mientras tanto, la entidad cerrará 2018 como la única OPV de los últimos tres años que aguanta en positivo el mercado bajista.

Cie Automotive: La automoción llega por primera vez al Ibex 35

El 10% de la economía española proviene del sector automovilístico y, sin embargo, no tenía representación en el Ibex 35 hasta que en junio llegó Cie Automotive, la joya de la corona de muchos gestores valor de este país. La compañía presidida por Antón Pradera hoy registra pérdidas del 3,5% en 2018, una nimiedad comparado con el desplome que protagonizan pares europeos como Valeo o Faurecia -pierden un 60% y un 51%, respectivamente-, aunque sí da una idea de las dudas que existen sobre el sector en plena guerra comercial, teniendo en cuenta que Cie llegó a revalorizarse un 46% durante los primeros meses de 2018.

En este ejercicio, ha rehecho su plan estratégico para 2020 par hacerlo más exigente. El consenso cree, a pesar de la caída en bolsa, que cumplirá los objetivos. Su beneficio alcanzará los 295 millones en 2020, un 28% más que este año; y su margen ebitda superará el 18%.

Ence: Más ciclo para el índice en pleno 'frenazo' de la economía

Ence es la novata del Ibex 35 ante su incorporación el pasado 24 de diciembre al ocupar el hueco que deja Dia. Con su capitalización, en 1.700 millones, se coloca penúltima, por delante de Técnicas Reunidas. La compañía especializada en la fabricación de papel y en renovables desembarca en el selectivo en sus horas más bajas. Cae un 40% desde los máximos de abril -sobre los 8,9 euros- después de haberse pegado un 'calentón bursátil' que le llevó a casi duplicar su valor en bolsa desde los 5 euros a los que cotizaba en febrero.

Los analistas confían en el potencial de Ence que sitúan próximo al 50% sobre los niveles actuales, aunque reconocen que la situación es delicada dadas las dudas sobre el crecimiento mundial que provocaría una caída de la demanda de papel. Ence presentó hace quince días un plan estratégico para 2023 en el que plantea diversificar su negocio y que una cuarta parte de su ebitda -sobre un total de 550 millones- provenga de las renovables.

Opas: Abertis, Hispania, Axiare y Telepizza dicen adiós a la bolsa

Aunque el mercado de las OPV (oferta pública de venta) se secó antes, incluso, del verano, no ha sucedido lo mismo con el capital privado. Este año ha sido particularmente prolífico en lo que a operaciones corporativas se refiere y todas han acabado con la exclusión de las compañías adquiridas de la bolsa española. El culebrón real lo protagonizó Abertis, por la que se enfrentaron Atlantia y ACS, contraopándose una a la otra, hasta que decidieron, finalmente, repartirse la compañía. Antes de esto, los accionistas de Abertis se llevaron pingües beneficios, ya que la acción fue excluida casi en máximos históricos, tras subir un 45% en el año previo.

Hispania fue vendida al fondo Blackstone, que está de compras por España, y también se ha hecho, entre otros, con la filial hotelera del Sabadell, HIP, este año. Colonial decidió lanzarse a por Axiare para crecer más rápido y, la última operación, ha estado protagonizada por el fondo KKR, que retira a Telepizza de la bolsa tres años después.