"Con Trump nunca se sabe". Esa frase, si se pronuncia con resignación, podría ser el sentir general del mercado ante el preacuerdo comercial entre Estados Unidos y México, escenificado este lunes con vanidad televisiva por el presidente de la primera potencia del mundo.
Con un matiz más que relevante: aunque "no se puede dar nada por definitivo", según observa el experto del IEB Ramón Casilda, todo apunta a que el sector de la automoción saldrá beneficiado. Y así se reflejó en bolsa. En una jornada tibia en Europa, en la que el EuroStoxx 50 cedió un 0,24%, el Ibex 35 un 0,55% y el Dax 30 alemán –el índice más exportador– permaneció plano, los fabricantes de coches más expuestos a Norteamérica, como Renault, Volkswagen, BMW o incluso la española Cie Automotive lideraron los ascensos en el parqué.