La pasada semana Amazon pasó el segundo examen del año ante los inversores y lo volvió a hacer con nota, sobre todo, atendiendo a la asignatura que se le venía resistiendo en presentaciones anteriores, los márgenes de beneficio.
La mejora en este sentido es drástica. Si a comienzos de año los expertos preveían que sólo 1,7 de cada 100 dólares que vendiera en 2018 los convertiría en beneficio neto, ahora las expectativas sitúan esta misma ratio por encima del 3,5%. "Esta fortaleza procede, sobre todo, de su negocio de servicios en la nube, el segmento publicitario y la mejora de eficiencias operativas de su negocio principal", explican desde Aegis Capital.