Wall Street había vivido esta semana un verdadero furor, ya que sus tres principales índices, el Dow Jones, el Nasdaq 100 y el S&P 500 lograron marcar máximos históricos. No obstante, esa euforia se ha ido desvaneciendo y, al cierre de la semana, tan sólo el Dow Jones ha conseguido mantener el hito.
Con un alza en las últimas cinco sesiones superior al 1%, el selectivo ha puesto su nueva cota histórica en los 21.830 puntos marcados el viernes. Mientras, el S&P 500 cerró la semana prácticamente plano y el Nasdaq 100 se quedó a menos de un 1% de perder los 5.000 puntos.
Por su parte, el dólar no pudo mantener las alzas en su cruce contra el euro y marcó mínimos desde enero de 2015. Y es que la 'moneda única' ha despedido la semana subiendo más de un 0,6%, lo que ha catapultado al par hasta los 1,175 dólares, el nivel más alto en más de dos años. De este modo, el euro se queda a un 0,4% de los 1,18 dólares. "Los 1,1720-1,18 dólares son el techo del amplio lateral de los últimos dos años y la resistencia que debe ser superada para que podamos hablar de un cambio de tendencia en plazos largos y podamos valorar objetivos de subida hacia los 1,32 dólares", indica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader.
A este respecto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) consideró el viernes que el dólar se encuentra sobrevalorado entre un 10% y un 20%, respecto de los fundamentos económicos de Estados Unidos a corto plazo, mientras que el euro, el yen y el yuan cotizan en línea con los mercados.
La debilidad que el dólar ha mostrado en la última sesión de la semana ha encontrado su respuesta en el petróleo, que sigue con su escalada. Así, el precio de barril 'Brent' ya se sitúa por encima de los 52 dólares tras subir en la semana más de un 9%, su sesión más alcista en el año. En este sentido, la disposición de la OPEP y otros productores a mantener el recorte de producción de 1,8 millones de barriles diarios, ha impulsado a la materia prima. No obstante, el consejero delegado de Royal Dutch Shell, Ben Van Beurden, ha advertido que la petrolera tiene asumido que los precios del petróleo no volverán a los niveles de 2014 y que tiene que adaptarse a una cotización de 50 dólares.