Mario Draghi, como tantas otras veces, tiene la llave que abre la puerta a la continuidad de las subidas en las bolsas europeas. Los bancos esperan el discurso del presidente del Banco Central Europeo (BCE) a un 2% de resistencias. Si el sector consigue superarlas, el equipo de analistas de Ecotrader confía en que los índices se lanzarán a por sus primeros objetivos.
El único selectivo que mostró ayer impaciencia fue el Ibex 35, que consiguió marcar un nuevo máximo anual, quedándose a un 4% de los 10.250 puntos, la meta alcista fijada por Joan Cabrero, director de estrategia del portal de inversión de elEconomista, después de que batiera resistencias hace ya dos semanas.
"Aparte de este acontecimiento, este miércoles no se vio nada destacable, puesto que el sector bancario europeo no ha conseguido todavía batir los máximos del año que estableció en el mes de enero, que es lo que esperamos para confiar en un contexto alcista sostenible en próximas semanas", explica el analista.
Sí hay entidades concretas que ya han conseguido superar sus altos de 2017 en las últimas sesiones, como es el caso en España de BBVA o de Banco Sabadell. Pero, en conjunto, el sector ha esperado a decidirse tras escuchar a Draghi, que comparece públicamente este mismo jueves, tras la reunión mensual del BCE.
La cita se anticipa tranquila, sin cambios de rumbo ni pistas nuevas sobre la política monetaria de la entidad, pero el mercado está ansioso por escuchar al italiano. No se esperan giros en el programa de estímulos ni en los tipos de interés, pero la mayor parte de los encuestados por Bloomberg cree que Draghi admitirá que los riesgos han mermado.
Tanto, que con el rendimiento de la deuda soberana disparándose nuevamente en la jornada de ayer, los inversores ya descuentan una primera subida de tipos en la eurozona en la reunión de marzo del año que viene. Precisamente la banca, será el sector más beneficiado de esta decisión.
Para la segunda cita importante hay que esperar a la próxima semana. El mercado, además de lo que pueda mostrar el BCE, se encuentra expectante ante la inminente subida de tipos en Estados Unidos por parte de la Reserva Federal.
Este incremento en el precio del dinero ya lo anticipó el viernes pasado la presidenta del organismo, Janet Yellen, en su discurso en la Fed de Chicago, en el que consideraba "apropiado" un nuevo paso hacia la restricción de la base monetaria, basándose en que se están cumpliendo las previsiones en torno a la inflación y al empleo.
Todo apunta pues a que no habrá que esperar más que unos días para confirmar lo que el mercado espera: que Yellen suba los tipos de interés en la próxima reunión del 14 y 15 de marzo.
Entretanto, Joan Cabrero insiste en que, a corto plazo, "no habrá ningún signo de deterioro alcista mientras el EuroStoxx 50 no pierda la base de la consolidación de las últimas sesiones que está en los 3.370 puntos". En Wall Street, el principal nivel a vigilar es la zona de soporte de los 2.363/2.351 puntos del S&P 500, que este jueves cumple 8 años de ciclo alcista.
Susto del petróleo
Eso sí, ayer se avivó un foco de incertidumbre que llevaba semanas olvidado: el petróleo sufrió una fuerte caída ante el incremento imprevisto en los inventarios de Estados Unidos.
Este inesperado dato deja entrever que el mercado podría seguir mostrando un exceso de oferta a pesar del recorte de producción de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). La flexibilidad de la industria del shale está contrarrestando el recorte de la producción del cártel que ve cómo sus planes se resquebrajan poco a poco.