Cuando Repsol presentó su plan estratégico de cara al periodo 2016-2020, la cotización de la compañía sufrió un fuerte varapalo a raíz de un informe de Goldman en el que reiteraban la recomendación de venta sobre la petrolera y valoraban negativamente la hoja de ruta marcada por la compañía. Con solo 136 palabras, la entidad norteamericana derrumbó los títulos del grupo, que pasaron de llegar a subir un 4% a retroceder un 6%.
Sin embargo, ahora las tornas han cambiado. El pasado viernes Goldman modificó su consejo sobre Repsol y le otorgó una recomendación de compra, lo que aupó los títulos de la compañía un 4%, convirtiéndola en la firma más alcista del Ibex en el día. Sin embargo, para poder resucitar a la compañía después de haberla matado en octubre del pasado ejercicio, el banco de inversión se ha tenido que esforzar algo más: en concreto, el documento consta del doble de palabras que el publicado a raíz del plan estratégico.