El hecho de que Wall Street aguantara soportes invita a pensar que los mercados pueden rebotar, si no ahora, una vez que toquen mínimos anuales. Mantenemos sin cambios nuestra exposición a bolsa.
Estas primeras sesiones de febrero están confirmando una cosa: 2016 no será un año fácil para las bolsas. La pérdida de soportes que protagonizaron ayer los grandes índices europeos les llevaron a enfrentarse a su siguiente nivel: los mínimos del año. Lo que provocó ayer las fuertes ventas a las que se enfrentaron los mercados fue la confirmación en que quizá sí todo lo que está sucediendo en China acabe por tener un impacto en EEUU y, por tanto en el resto del mundo, además de las malas noticias que llegan desde el sector financiero italiano.