Mapfre acumula una caída del 10% desde el máximo anual que alcanzó el 15 de abril en los 3,605 euros. El retroceso en los precios de la deuda española y sus malos resultados trimestrales están pasando factura a la aseguradora.
A finales de febrero, Esteban Tejera, vicepresidente de la compañía, afirmaba -en una entrevista concedida a elEconomista- que Mapfre estaba cómoda con el colchón que suponen las plusvalías latentes de su inversión en deuda española, a la que destina más de 16.000 millones de euros.
Pocos días después, el 12 de marzo, los futuros del bono español a 10 años marcaban sus máximos anuales en los 144,71 euros. Sin embargo, desde entonces, el precio de los mismos ha caído hasta la zona de los 136 euros -cerca de los mínimos anuales y de niveles no vistos desde diciembre de 2014- por las dudas que el tira y afloja entre la Unión Europea y Grecia ha inoculado a las economías de la periferia europea. Un escenario que ahora se agrava por la incertidumbre que han suscitado los últimos resultados electorales en España.
Este descenso del precio de los bonos ha pasado y podría seguir pasando factura a Mapfre en el parqué a corto plazo. No en vano, en total, Mapfre tiene 27.000 millones de euros invertidos en renta fija gubernamental, el 60% de ellos en deuda pública española y cerca de un 13% (unos 3.400 millones) en renta fija de otros países europeos. Otro 5% corresponde a bonos estadounidenses y cerca de un 20% a deuda latinoamericana. A largo plazo, este riesgo podría matizarse si se tiene en cuenta que las aseguradoras no suelen vender los bonos antes de que estos venzan.
Además del retroceso de la deuda española, en las últimas semanas, Mapfre también está cotizando negativamente sus resultados trimestrales. En los tres primeros meses del año, la aseguradora ganó 201,4 millones de euros, lo que supone un descenso del 8% respecto al mismo periodo del año anterior. Una disminución que JP Morgan achaca "en gran parte" a los resultados en Norteamérica, donde "debido a los fuertes temporales de nieve, Mapfre presentó pérdidas por 50,8 millones de euros".
Pero los títulos de la compañía no son los únicos que han sufrido en las últimas semanas. La recomendación que emite sobre ellos el consenso de analistas que recoge FactSet sigue siendo un mantener, pero se ha deteriorado y se ha acercado al consejo de vender desde primeros de mayo. Las firmas de inversión han rebajado también su precio objetivo hasta 3,28 euros, por lo que, pese a las caídas, Mapfre prácticamente no cuenta con potencial alcista.
Concretamente, tras conocerse los resultados, el pasado día 6, Mapfre veía cómo dos entidades, Sabadell y Beka, empeoraban su recomendación sobre ella. La primera cambiaba su consejo de comprar por el de vender y la segunda modificaba su compra por un mantener. El mismo día, Beka revisaba su precio objetivo desde los 3,59 a los 3,38 euros y Sabadell rebajaba su valoración desde los 3,42 hasta los 3,20 euros. En estos días, también han reiterado su recomendación de vender BNP Paribas y JP Morgan.
Entre las fortalezas que mantienen el atractivo de Mapfre (MAP.MC) pese a las caídas bursátiles está su reducido PER (número de veces que el beneficio se recoge en el precio de la acción) estimado para 2015. La aseguradora cuenta con la segunda ratio más baja del Ibex 35 (10,2 veces), solo por detrás de OHL.
Asimismo, el consejo de administración de la aseguradora acordó recientemente abonar un dividendo complementario de 0,08 euros por acción con cargo a los resultados del ejercicio 2014 el próximo día 18 de junio. A cuenta de los resultados de ese año, ya pagó 0,6 euros por acción el pasado 15 de diciembre.