Jornada clave en la temporada de presentaciones de resultados del primer trimestre del año. El Ibex 35, en plena reestructuración alcista para atacar los 11.500 puntos, queda a merced de cómo coticen sus cuentas compañías como ACS o Sacyr, que presentaron ayer al cierre, y de que se conozcan las de FCC, OHL, Abertis o Técnicas Reunidas.
Llegó el momento de saber cómo juzga el mercado los primeros tres meses de los grandes grupos contructores y de infraestructuras españoles. De todos, el que peor lo tiene y lo ha tenido en las últimas sesiones es OHL después del escándalo propiciado por su filial en México. El comportamiento del resto de grandes grupos está por ver pero está claro que el Ibex 35 estará marcado por las distintas reacciones que puedan tener los inversores una vez conocidas sus cuentas.
Hoy serán las constructoras y mañana Telefónica la que acaparará toda la atención con sus resultados trimestrales. En Europa, surgen este miércoles otras dos referencias claves: Deutsche Telekom y RWE, aunque el foco empresarial no se retira de Airbus, que ya acumula un 6% de caída en dos sesiones desde que el sábado se siniestrara un avión militar de su modelo A400M. Habrá que ver cómo se toma ahora el mercado que el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) haya retirado de forma temporal el permiso de vuelo a estos aviones del grupo aeroespacial europeo.
Otra compañía que centra las miradas es Indra después de que ayer se desplomará más de un 7% tras anunciar que suspendía el dividendo.
Esta maraña empresarial envuelve la reestructuración alcista que, técnicamente, afronta el Ibex 35, según explica el director de estrategia de Ecotrader, Joan Cabrero. "Estas caídas de las últimas sesiones encajan a la perfección con el escenario de reestructuración alcista que favorecemos desde que el selectivo español alcanzara la zona de giro potencial de los 10.850/11.000 puntos", advierte el analista.
"De hecho, gracias a las últimas caídas ya podemos identificar una resistencia clave en los 11.500 puntos, que se ha convertido en la línea divisoria que separa un contexto de consolidación de uno de reanudación de la tendencia alcista de los últimos meses, dependiendo de si el Ibex 35 se mantiene por debajo o lo supera respectivamente", continúa. El primer objetivo de esta contaataque alcista son los 11.885 puntos, "que son la zona de altos del año y origen de la última corrección".
En Europa, sin tanta cita empresarial, el mercado continúa pendiente de Grecia, que camina hacia el impago, y desde la perspectiva técnica, Cabrero señala los 3.650 puntos del Eurostoxx 50 o los 11.710/11.750 del Dax 30 alemán como "la línea divisoria que separa un contexto de mayor consolidación de uno alcista que abriría la puerta a una vuelta a los altos del año, que muy probablemente serían superados".