Las bolsas estadounidenses sumaron una jornada más de avances, acercándose el S&P 500 hacia niveles históricos. La temporada de resultados está siendo mucho más positiva de lo estimado por los expertos, lo que está generando atractivo para los inversores por las empresas del país.
En lo que va de temporada de resultados las compañías estadounidenses están consiguiendo batir las expectativas de los expertos con creces. Según datos de Bloomberg, el 80% de las empresas del S&P 500 que han presentado sus cuentas hasta ahora, han conseguido publicar beneficios superiores a los previstos por los analistas con anterioridad.
Esto está debatiendo las perspectivas negativas que mantenían los analistas antes de que comenzase la temporada de resultados, algo que ahora está generando confianza por parte de los inversores por el buen momento de estos valores, y está generando compras de forma generalizada en los principales índices del país.
Además, hoy se publicó un buen dato de ventas de viviendas en el país durante el mes de marzo: estas avanzaron un 6,1% frente al mes anterior, muy por encima del 3,1% que estimaron los expertos con anterioridad.
Por todo lo anterior el Dow Jones industrial subió hoy un 0,5%, mientras el Nasdaq Composite avanzó un 0,4% y el S&P 500 un 0,52%, quedándose este último a menos de un 0,5% de sus máximos históricos alcanzados el pasado mes de marzo.
Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader explica sobre el comportamiento de las bolsas estadounidenses que "lo más destacable fue ver como el Standard & Poor's 500 volvió a presionar la resistencia que presenta en los 2.110 puntos, esto es, la tangencia con la directriz bajista de la figura triangular que venimos señalando a lo largo de las últimas semanas. Mientras no se supere esta resistencia no podrá darse por finalizada la fase de consolidación que define el índice estadounidense y sin esto vemos muy vulnerable eventuales alzas al otro lado del Atlántico".
El conflicto que mantiene Arabia Saudí en Yemen ha sido uno de los motores que ha movido el precio del petróleo durante las últimas semanas. La especulación de que los enfrentamientos terminasen afectando al estrecho de Bab el-Mandeb, en la costa yemení, y uno de los cuellos de botella por donde más petróleo pasa de planeta, generó subidas para el precio del Brent durante las últimas semanas.
Sin embargo, tras anunciarse la semana pasada que las hostilidades habían terminado, los alcistas se dieron un respiro y el barril de referencia en Europa atravesó tres jornadas de descensos. Hoy han vuelto las hostilidades a la región, y tanto el Brent como el West Texas se han revalorizado: un 1,5% y 2,1%, hasta los 63 y 56 dólares respectivamente.
Además de la actualidad geopolítica, el barril estadounidense avanzó hoy impulsado por un informe del gobierno del país que reflejó como el mayor almacén de la nación aumentó sus reservas de petróleo a un ritmo menor de lo que está siendo habitual durante los últimos meses.
Al margen del petróleo, los metales preciosos fueron protagonistas durante la jornada, ya que acapararon los puestos como las materias primas más bajistas del día: el paladio cedió más de un 2%, el platino un 1,7%, la plata cerca de un 1,5% y el oro más de un 1,3%.
Así, como se destaca desde Bloomberg, esta fue la caída más fuerte del oro en seis semanas. Los datos positivos sobre las ventas de casas en Estados Unidos pueden haber generado estos descensos, llevando a los inversores a descartar los activos refugio como son estos metales, al considerar que este dato macroeconómico es un reflejo del avance de la recuperación económica en el país.
Por su parte, los contratos de futuro sobre la madera experimentaron un avance superior al 4% durante el día, lo que situó a esta materia como la más alcista del día entre las materias que monitoriza Bloomberg.
La volatilidad ha vuelto a ser el aspecto más característico del cruce que mantiene el euro/dólar. De este modo, la divisa común ha llegado a anotarse una subida de alrededor del 0,6%, a las 11:00 horas (hora española) gracias a la que ha rozado el nivel de los 1,08 dólares. Horas después corregía hasta anotarse una caída de más del 0,2%. Sin embargo, finalmente logró rebotar de nuevo y quedarse prácticamente en el mismo nivel en el que cerró ayer: los 1,07 dólares.
Grecia ha vuelto a ser la causa que ha movido a la divisa del Viejo Continente. La noticia de que había ganado el acceso a los fondos de emergencia del Banco Central Europeo pudo ser la que provocó que los inversores recurrieran al euro durante la jornada.
Sin embargo, con el paso del tiempo han debido optar por recoger beneficios provocando que quede prácticamente en el mismo nivel que en la jornada previa. A ello se ha podido unir que el mercado no confía plenamente en Grecia, como muestran informes de Bloomberg que indican que los gobiernos de la zona euro podrían estar preparando otra ronda de conversaciones sobre la crisis financiera del país heleno.
Por otro lado, el franco suizo se ha comportado como la divisa más bajista del día. Esto ha venido motivado por el anuncio del Banco Nacional de Suiza de que se incrementará el número de depósitos que se verán afectados por los tipos de interés negativos, según se destaca desde Bloomberg.
Esto hizo menos atractiva a la moneda para los inversores, lo que ha provocado que haya experimentado su mayor caída en dos meses frente al euro, con un descenso cercano al 1,3%, similar al experimentado en el cruce que mantiene con el dólar.