Tras caer con fuerza el viernes pasado, contagiados por los descensos en Europa, las bolsas estadounidenses han recuperado hoy parte de las caídas, con avances generalizados propiciados por las fuertes subidas de algunas compañías tecnológicas.
La semana ha arrancado con avances generalizados a ambos lados del Atlántico, tras la debacle sufrida el viernes pasado, cuando la mayor parte de índices europeos cerraron por debajo de los mínimos de la semana anterior, terminando con una racha de 14 semanas consecutivas en las que esto no ocurría, y contagiando de sus descensos a las bolsas estadounidenses.
Sin embargo, esta semana ha arrancado con otra tónica, o al menos eso parece al analizar los avances que han experimentado las principales bolsas en Estados Unidos: el Dow Jones sumó un 1,17%, el S&P 500 un 0,9% y el Nasdaq Composite un 1,27%.
Estos avances fueron propiciados por las fuertes subidas que experimentaron algunas compañías tecnológicas en el país, como el 4% de Amazon o el 3,5% de Discovery Communications, Microsoft, Intel o Seagate Technology.
Sobre el comportamiento de la bolsa estadounidense, Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader explica que "la caída que vimos en los principales índices estadounidenses el viernes encaja a la perfección dentro de lo que podría ser una consolidación de niveles previa a mayores subidas. Todavía no se ha perdido ningún soporte, como son los 2.060 y sobre todo los 2.040 en el Standard & Poor's 500 o los 4.280 del Nasdaq 100, que ponga en jaque las posibilidades de seguir viendo mayores alzas en próximas semanas".
Por primera vez en cuatro sesiones la divisa europea cayó en el cruce que mantiene con el dólar estadounidense. La actualidad sobre las negociaciones entre Grecia y sus socios europeos ha llevado al euro a caer de nuevo hasta los 1,07 dólares.
El lunes, Alexis Tsipras, el Primer Ministro griego, ordenó a los Gobiernos locales de país que envíen sus fondos al banco central griego, por la necesidad que existe para pagar los salarios de los funcionarios, las pensiones de los jubilados y la deuda con el Fondo Monetario Internacional.
Esto volvió a poner en el punto de mira del mercado la inestabilidad política que existe en la zona euro, además de generar la especulación de que Grecia pueda terminar saliendo de ella. Así, los inversores decidieron vender euros, algo que ha sido la tónica general en el año, y que sin embargo no lo fue durante la semana pasada.
Con el descenso del 0,7% que experimentó la divisa europea frente al dólar, el cruce volvió al nivel de los 1,07, y se terminó con la racha más larga de avances de este par en más de un año: 4 jornadas consecutivas subiendo. Ahora, todo parece haber regresado a la normalidad en el cruce de euro con el dólar, presionado a la baja por la actualidad política, además de la inyección de 60.000 millones de euros al mes por parte del Banco Central Europeo.
Así, la única estrategia pro euro que mantenemos abierta desde Ecotrader en la tabla de recomendaciones no funcionó bien hoy: el cruce del euro con el yen llegó a caer un 0,7% en la jornada.
De este modo, el crudo estadounidense se ha acercado al máximo anual marcado la semana pasada y ha cerrado el día rondando los 56,5 dólares por barril. El Brent, por su parte, ha concluido con una subida cercana al 0,4% después de haber rebotado de una caída que le ha llevado a rozar los 62 dólares por barril.
La Agencia de Información Energética de Estados Unidos publicó un nuevo récord de los inventarios en Cushing, el punto de entrega de los contratos sobre petróleo en el país. En concreto, subieron 1,29 millones la semana del 10 de abril y concluyeron en los 61,5 millones.
Sin embargo, lejos de producirse una caída del precio del crudo derivada del exceso de la oferta, la especulación acerca de un recorte del ritmo de producción en Estados Unidos ha animado a los inversores a seguir fijándose en el oro negro.
Y es que hay ciertas evidencias que muestran la caída de la producción. Como por ejemplo el número de plataformas petrolíferas en Estados Unidos que, según fuentes de Bloomberg, marcaron mínimos de 2010 la semana pasada al caer hasta las 734, 26 menos que una semana antes. Por ello, la Agencia de Información Energética del país destacó el pasado 13 de abril que durante el próximo mes de mayo la producción de esquisto caerá en Estados Unidos por primera vez en la historia -se monitorizan estos datos desde 2013-.
Por otro lado, la tensión existente en Oriente Próximo es la que puede estar impulsando al precio del Brent. Al conflicto entre Arabia Saudí (principal productor a nivel mundial) con los rebeldes yemenís, se le une la posibilidad de un inminente ataque terrorista perpetrado por el autodenominado Estado Islámico. Desde el país se ha alertado a la compañía petrolera estatal, Aramco y a los centros comerciales de la capital, Riad, según informaciones del Ministerio del Interior saudí de las que se ha hecho eco Bloomberg.
De este modo, el alza de hoy se añade a al avance cercano al 11% que experimentó el Brent durante la semana pasada, cuando contó con la subida semanal más pronunciada desde el 20 de marzo. El barril de referencia en Estados Unidos, West Texas, incrementó su precio en torno a un 9%, una subida nunca vista en más de 4 años.