El EuroStoxx 50 alcanzó la semana pasada el entorno de los 3.867 puntos, que son los niveles donde cotizaba la principal referencia europea antes del covid crash y que coinciden con la resistencia que también frenó la tendencia alcista el año 2015.
Este es el objetivo inicial que, como he repetido en numerosas ocasiones, manejábamos en Ecotrader para el proceso de reconstrucción alcista que desarrollan las bolsas del Viejo Continente desde los mínimos de hace un año. Su alcance no nos sorprendería que pudiera frenar temporalmente los ascensos y provocar una fase de consolidación o corrección de parte de las últimas subidas, que podría asemejarse en intensidad a la vivida por el mercado tecnológico durante las últimas semanas.