Tras varios años moviéndose a la baja y recibiendo recomendaciones negativas por parte del mercado, 2016 parece que ha sido el punto de inflexión para que los recursos básicos sean una oportunidad para el próximo ejercicio. Son muchas las casas de análisis que estiman que hay que adquirir estos activos y un ejemplo de ello es Goldman Sachs, que aconseja sobreponderar por primera vez en cuatro años.
La entidad señala que "la reciente reaceleración en los índices PMI y el aumento de las expectativas de inflación sugieren que los mercados de productos básicos están entrando en un ambiente cíclicamente más fuerte", lo que viniendo del mayor distribuidor por ventas de materias primas de Wall Street provoca que sus opiniones tengan un peso extra entre los inversores, tal y como señalan en Bloomberg. Una opinión que concuerda con la de Hernán Sánchez, analista de CMC Markets, que estima que "una gran parte de las materias primas han estado castigadas el último año y medio, descontándose que la recuperación de la economía mundial podía ser más lenta de lo esperado". Sin embargo, llevan buena parte de 2016 recuperándose por las buenas noticias que llegan desde China y, posteriormente, por la victoria de Donald Trump y su promesa de incrementar el gasto en infraestructuras.