A pesar de que la cosecha del año pasado fue inferior a las de los últimos años por la sequía, Brasil mantuvo un sólido ritmo de exportaciones acudiendo a sus inventarios para aprovechar la caída del real. Ahora, la divisa se ha estabilizado y el mercado prevé un descenso de sus exportaciones que puede incrementar su precio.
El café arábiga arrancó el año 2014 en los 110 dólares por libra, y debido a una fuerte sequía en Brasil, responsable de más de la mitad de la producción de la materia, además de una epidemia de roya -enfermedad que estropea la planta y deteriora el número de granos que produce- y la decisión del Gobierno brasileño de reducir las tierras de cosecha para tratar de incrementar su precio, el mercado se lanzó a comprar la materia, generando una subida del 100% de su precio en poco más de 10 meses, hasta los 221,90 dólares.
Sin embargo, según destaca la Organización Internacional del Café -ICO, por sus siglas en inglés-, mientras la cosecha ese año cayó hasta los 45,3 millones de sacos -de 60 kilogramos-, por debajo de los 49,2 millones en 2013 / 2014, y los 50,8 millones de la temporada anterior, las exportaciones de Brasil avanzaron un 12%, hasta los 36,8 millones de sacos. El avance de las exportaciones pudo ser el catalizador que generó descensos en el precio de la materia, hasta cerrar el año 2014 con un avance del 50,5%, que, sin embargo, lo situó como el recurso básico más alcista de 2014.
Teniendo en cuenta que el consumo brasileño supuso 21 millones de sacos, la OIC destaca en su informe de abril sobre el mercado del café, que el país acudió a sus reservas del grano para incrementar las exportaciones, y así aprovechar la caída de su divisa -el real brasileño cae cerca de un 27% desde los máximos de julio en 2014, cuando empezaron los descensos- , exprimiendo las ganancias que generó la venta de café en el extranjero.
Ahora, tras apreciarse una estabilización del real brasileño, y estimar una cosecha para la temporada 2014 / 2015 que será muy similar a la del ejercicio anterior -según el Gobierno brasileño, se producirán entre 44 y 46,6 millones de sacos- la Organización espera que haber acudido a las reservas en 2014 afectará a las exportaciones este año, que se verán reducidas, lo que podría impulsar el precio de la materia en el mercado.
De hecho, como se puede apreciar en el gráfico, el consenso de analistas que recoge Bloomberg espera avances destacables para el precio del café hasta final de año. En concreto, desde los 137 dólares a los que cotiza la libra en la actualidad, la media de expertos espera que se dé un rebote de más del 19%, hasta los 163 dólares al finalizar el año. Además, consideran que en el arranque de 2016 las subidas continuarán, hasta los 174,1 dólares al finalizar el primer trimestre.
Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader explica sobre el aspecto técnico de los contratos de futuro del grano arábiga (con ticker KC1), que "el recurso básico confirmará un giro alcista a corto plazo si supera los 148 dólares por libra. Si lo hace, estaría confirmando un patrón alcista a corto plazo que alejaría la posibilidad de descensos hasta los 100 dólares, el soporte clave a medio plazo que se debe vigilar".
El inversor que quiera tratar de aprovechar el buen aroma del café en bolsa, puede invertir a través de un fondo cotizado -ETF-, como por ejemplo el iPath Pure Beta Coffee ETN (ISIN US06740P1488). El fondo mantiene una comisión de gestión del 0,75%.