Muy pocas sicavs españolas consiguen aguantar en positivo este año pero algunas logran casi lo imposible ya que se anotan rentabilidades del 20 por ciento. Descubrimos dónde invierten.
Este 2016 no está siendo un año sencillo para conseguir generar rentabilidades atractivas a los inversores. De hecho, una prueba de ello se ve en las sicavs. Pese a la flexibilidad que tienen a la hora de invertir solo 322 de las 3.352 sociedades que hay en España consiguen aguantar en positivo en el año, lo que en porcentaje es de solo el 9 por ciento del total, según los datos de Morningstar.
Con este panorama conviene echar un vistazo a aquellas que mejor se están comportando en el año. Primera sorpresa. Ninguna forma parte del top ten de sicavs, en el que suelen incluirse las sociedades de Alicia Koplowitz, los Abelló o la familia Ortega. Segunda sorpresa. Ninguna tiene entre su mayor posición la renta variable pese a ser según muchos expertos el único activo que por valoración puede ser interesante para el inversor en el momento actual. Y tercera sorpresa. Pese a ello consiguen rentabilidades superiores al 20 por ciento este año.
Sus nombres son por este orden Balaguer 88 de Inversiones, Inver 99 y Lempoira Sicavs, gestionadas las dos primeras por Gesiuris y la tercera por Credit Suisse. Todas ellas consiguen rentabilidades que exceden del 20 por ciento y todas ellas tienen en común que su primera posición, la que ocupa el mayor porcentaje de su cartera, en futuros sobre el euro/dólar. Su apuesta por un euro alcista en contra el de dólar, algo que muy pocos se planteaban a finales del año pasado al calor de la subida de tipos de la Fed, explica gran parte de su positivo comportamiento este año. No en vano, la decisión de la Fed de limitar las subidas de tipos de interés en EEUU -ahora se habla de como mucho dos repuntes este año cuando a finales de 2015 se pronosticaban cuatro- y la falta de herramientas por parte del BCE para seguir depreciando el euro aunque sea de manera indirecta explica que este año la moneda única acumule un rendimiento del 7,26 por ciento en su cruce contra el dólar.
Y, al menos desde el punto de vista técnico esa revalorización aún puede ir a más. "Las caídas de las últimas sesiones las vemos como una simple consolidación previa a lo que podría ser una nueva subida en busca de objetivos que manejamos en los 1,15/1,1550 dólares por euro, desde donde habrá que estar muy expectantes puesto que en ese entorno de resistencia no descartamos ver un agotamiento alcista", afirma Joan Cabrero, jefe de estrategia de Ecotrader.
En su comportamiento a corto plazo mucho influirá las conclusiones que se extraigan este jueves de la reunión del BCE. Según opinan desde Ebury Partners, "el consenso apunta a que la política monetaria no se verá alterada"pero eso no implica que el euro vaya a comportarse una manera tranquila durante esa sesión ya que "los mercados estarán impacientes por escuchar las respuestas de Draghi a cuestiones como el mayor énfasis en la relajación fiscal y la reacción del Consejo al reciente fortalecimiento del euro y su impacto en la política monetaria futura. Esperamos un jueves volátil para el euro, tanto durante como después de la reunión del BCE", afirman.