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Alerta agresiva
Recoger beneficios en Línea Directa para financiar el stop y tras alcanzar la acción la zona de los 1,365 euros. Un retroceso del 50% de la vela diaria de hoy, esto es los 1,31 euros, sería del todo normal y lo que sugeriría esperar si alguien no compró esta mañana cuando mandé la alerta.

¿Tiene una cartera de valores americanos? El efecto divisa ya 'se come' toda la rentabilidad del Dow Jones

7:00 - 20/07/2017
  • La rentabilidad ajustada al efecto divisa desaparece por completo
  • El euro se aprecia más de un 9,5% en el año frente al dólar
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Para un inversor europeo, lo que está pasando en el mercado de divisas este año bien puede suponer una auténtica tragedia griega. Como un castillo de naipes, la imponente rentabilidad que ha logrado el Dow Jones, el principal índice de Wall Street, se puede ver derribado por un enemigo inesperado, e impredecible, el efecto divisa.

Y es que ahora ya se cumple la extraña paradoja de ver al mercado norteamericano cotizar en zona de máximos (el Nasdaq y el S&P 500 los volvieron a asaltar en la jornada del miércoles mientras que el Dow Jones lo hizo por última vez el pasado viernes) a la vez que la rentabilidad ajustada al efecto divisa desaparece por completo (es el caso, por ejemplo, de quien tenga una cartera que replique al Dow Jones).

En lo que va de año, el euro se aprecia ya un 9,57% frente al billete verde, por encima del 9,3% de rentabilidad que acumula el selectivo industrial y a menos de un punto porcentual de la del S&P 500. Así, la tecnología es el único sectorial que se libra de esta circunstancia, ya que el Nasdaq rebota más de un 18% desde el comienzo del ejercicio.

Entre los principales catalizadores de los movimientos entre las dos grandes divisas del mundo destacan la política monetaria, los datos macroeconómicos y los distintos acontecimientos políticos de ambas áreas económicas. Este año se ha visto claramente el papel que juegan, y jugarán, las instituciones monetarias de Estados Unidos y Europa.

En este contexto, las pistas que vaya dejando el Banco Central Europeo sobre cómo y, sobre todo, cuándo, implementarán el esperado tapering (programa de reducción de compras de activos) serán claves para el devenir de la moneda comunitaria. De hecho, según una filtración publicada por la agencia Bloomberg, el BCE, que se reúne hoy jueves, habría puesto ya a trabajar a sus analistas para que planteen posibles formas de acabar con el QE. El ritmo de desarme y el tiempo de duración son dos de las cuestiones que podrían estar en debate.

Desde Monex, avisan que "cualquier cambio en el mensaje de Draghi podría hacer retroceder al euro, ya que ahora está descontando el inicio del tapering para comienzos del próximo año".Franck Dixmier, Director Global de Renta Fija de Allianz global Investors, añade que "Europa está experimentando actualmente un impulso de crecimiento positivo, un aumento muy gradual de la inflación subyacente y unos fundamentos económicos cada vez más sólidos. Como resultado, los miembros del consejo están debatiendo abiertamente la normalización de la política monetaria", añade.

Además, el experto cree que "curiosamente, los mercados parecen haber entendido el mensaje [los futuros del euro Overnight Index Average (EONIA) están tasando el primer aumento de 10 puntos básicos de los tipos de depósito para septiembre de 2018", concluye.

En esta misma línea se encuentra Unicredit, cuyos analistas esperan que "el euro se mantenga fuerte durante la segunda mitad de 2017, impulsado por dos factores principalmente: la buena tendencia macroeconómica en el Viejo Continente y la disminución de los riesgos asociados con eventos políticos como han sido el Brexit o las elecciones francesas".

Sin embargo, no todos los analistas lo prevén así. Desde la gestora Flossbach von Storch, están "convencidos" de que no vamos a presenciar "un cambio significativo en la política de tipos del BCE hasta el final del mandato de Draghi en 2019", y argumentan que "el endeudamiento masivo, la evolución demográfica en los países desarrollados y las perspectivas de crecimiento en los mercados de capitales son los tres principales lastres que, desde nuestra perspectiva, mantienen los tipos de interés a ras de suelo en el ámbito global".

La Reserva Federal, con dudas

Aunque el pasado mes de junio, la Reserva Federal incrementó por segunda vez en el año los tipos de interés, hay muchas dudas en torno a si veremos una subida más en 2017. Estas dudas vienen dadas por la debilidad de los datos de inflación del mes de junio, que sólo alcanzó el 1,6%, una décima por debajo del dato de mayo.

Además, la probada incapacidad de Trump para llevar a cabo su agenda política tras el nuevo fracaso en la última votación sobre la reforma sanitaria, ha incrementado, más si cabe, la incertidumbre en torno a las medidas inflacionistas prometidas en camapaña. De hecho, ni las palabras de la semana pasada de Janet Yellen ante el Senado asegurando que la institución monetaria cumpliría el guión, han servido de resorte para un dólar que ya se deprecia frente a las 16 divisas más importantes del mundo.

Potencial hasta los 1,32

La situación técnica apoya el escenario de que continúe el ascenso del euro frente al billete verde, tal y como explica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. "Todo apunta a que en próximas semanas, consolidaciones al margen, podríamos asistir a una continuidad alcista hacia objetivos que manejamos en los 1,1720-1,18 dólares por euro, que son el techo del amplio lateral de los últimos dos años", explica Cabrero.

"Esta resistencia de 1,172-1,18 dólares por euro es la que debe ser superada para que podamos hablar de un cambio de tendencia en plazos largos y podamos valorar objetivos de subida hacia los 1,32. Este escenario se mantendrá intacto mientras no ceda los 1,11 dólares por euro", concluye el experto.