La moneda cae más de un 4,2% frente al dólar estadounidense durante las dos últimas sesiones bursátiles, el descenso en dos días más fuerte desde hace casi 2 años. La reelección de Shinzo Abe como primer ministro anticipa más estímulos monetarios, lo que ha generado ventas generalizadas en la moneda.
La divisa japonesa ha arrancado la semana con importantes descensos, después de conocerse la reelección de Shinzo Abe como primer ministro del país nipón, y anunciar este que la economía seguirá siendo una de sus prioridades, y destacar la posibilidad de añadir nuevos estímulos económicos en el país. En concreto, Abe destacó que va a ordenar a sus ministros preparar planes orientados a incrementar la demanda doméstica en el país. Así, la posibilidad de más estímulos en Japón -el banco central ya mantiene un programa de compras de deuda-, junto con las subidas que ha experimentado la bolsa en los dos primeros días de semana, ha llevado al yen a caer casi un 4,2% desde el lunes, la mayor caída en dos días desde noviembre del año 2014.
Ayer fue la moneda más bajista de la jornada entre las diez divisas con más volumen de negociación del mercado, cayendo en torno a un 2% frente al dólar, después de cerrar la jornada del lunes con pérdidas del 2,2% en ese cruce. En este momento el dólar cotiza en 104,9 yenes, un alto que no se veía desde el pasado mes de junio.
Y es que, la subida que está teniendo lugar en las bolsas mundiales -Wall Street ha vuelto a máximos históricos y el índice japonés Nikkei 225 arrancó el lunes con avances que rozaron el 4 %- también está teniendo efectos en la cotización de la moneda nipona: es habitual que el yen y las bolsas mantengan una correlación inversa, ya que los inversores japoneses que hacen carry trade con su moneda suelen incrementar estas posiciones cuando la bolsa atraviesa momentos difíciles y las deshacen para volver a la renta variable cuando llegan las subidas.
Según se explica desde Bloomberg, esta subida ha pillado por sorpresa a los inversores: la semana pasada, antes de las elecciones, las posiciones alcistas en la divisa rozaban máximos históricos.
Al margen del yen y las divisas, la sesión ha estado marcada por los avances que ha experimentado el petróleo. Tanto el como el West Texas cedieron más de un 4%, recuperando parte de lo perdido durante las últimas sesiones.
El anuncio que ha llevado a cabo la Organización de los Países Exportadores de Petróleo -OPEP-, de que estima que en 2017 continúe el equilibrio en el mercado gracias al aumento de la demanda, ha podido llevar al mercado a comprar petróleo, olvidando algunas estimaciones que apuntan ya a que la sobreoferta ha regresado en el mercado de oro negro.
Al margen del crudo, el oro fue la segunda materia prima más bajista de la sesión, con descensos que tocaron el 1,6%. La subida que experimentaron las bolsas durante la sesión lastraron el atractivo del metal como refugio.