Situación de corto plazo:
En el más corto plazo prosigue la consolidación que desarrollan los principales índices norteamericanos durante las últimas sesiones, algo que podría tener continuidad tras perderse primeros soportes de muy corto plazo como son los 7.700 del Nasdaq 100 (NDX100.NQ) o los 26.300 puntos del Dow Jones Industrial (DJI.NY).
La cesión de estos soportes podría provocar que la consolidación en Wall Street fuera más amplia aunque por el momento no vemos nada que invite a cancelar un contexto de alzas adicionales que podría llevar al S&P 500 a la resistencia creciente que discurre por los 3.000 puntos, tal y como mostramos en el chart adjunto. Esta subida adicional en el S&P500 (SP500.CH) encajaría a la perfección con la búsqueda por parte del Nasdaq 100 de objetivos que manejamos en la resistencia psicológica de los 8.000 puntos, que además coincidiría con el objetivo que surge de proyectar la amplitud de la dilatación que tuvo el principal índice tecnológico el año pasado tras perder su soporte urbi et orbi, tal y como puede verse en el chart adjunto.
Situación tendencial:
Los mínimos establecidos la última semana del año pasado en los índices norteamericanos, tales como son los 5.895 puntos del Nasdaq 100, los 21.712 del Dow Jones Industrial y los 2.346 del S&P 500, han sido un suelo y el origen probablemente de la reanudación de la tendencia en subida libre absoluta que desarrolla el mercado estadounidense a largo plazo. S&P 500 y Nasdaq 100 ya han marcado nuevos máximos históricos y entendemos que es cuestión de tiempo que el Dow Jones Industriales y el Russell 2000 hagan lo propio. Una corrección en próximas semanas sería vista como una oportunidad para aumentar exposición de forma significativa en renta variable estadounidense.