Tímidos descensos en el ecuador de una sesión en la que lo más destacable es ver la incapacidad de las bolsas europeas de formar un rebote a pesar de haber alcanzado soportes clave como son los mínimos de octubre. Esto es algo preocupante ya que de ese rebote depende que se aleje el riesgo de ver la final cesión de soportes clave, que abrirían la puerta a una vuelta a los mínimos de agosto, algo que provocaría que las bolsas devolvieran gran parte de lo ganado durante el año.
En cuanto al Ibex 35, la cesión del soporte de los 10.100 puntos que vimos ayer es algo que no hace más evidenciar de nuevo la debilidad que presenta la renta variable española durante los últimos meses y cancela las connotaciones alcistas que tuvo la superación de resistencias de 10.410 puntos. En cualquier caso, no vemos una pérdida de soportes clave entre los grandes del Ibex 35, como puede ser el BBVA o el Santander, algo que sigue invitando a no dar por muerta la posibilidad de ver una recuperación en próximas semanas, que depende en cualquier caso del mantenimiento de soportes fundamentales como son los 9.800-9.930 puntos.