Números rojos en el ecuador de una sesión en el que las bolsas europeas siguen consolidando las fuertes alzas que vimos a comienzos de semana y que sirvieron para superar resistencias que permiten confiar en un escenario de continuidad alcista.
Que los índices europeos encuentren dificultades a corto plazo para sostener los avances lo vemos como algo del todo normal, pero de momento, no observamos nada que nos indique que las subidas no vayan a tener continuidad y todo apunta a que la consolidación de corto plazo es una simple pausa previa a mayores alzas. Una eventual consolidación no pondrá en aprietos la tendencia alcista que definen los principales índices europeos a lo largo de los últimos meses mientras no provoque el cierre de los huecos que se generaron en la apertura del lunes al alza. Para que estos huecos se mantengan abiertos es preciso que los índices no pierdan al cierre de una jornada los niveles donde cerraron la semana pasada, tales como son los 10.377 puntos en el IBEX 35.
El Ibex 35 se ha aproximado ya a los mínimos marcados en la sesión del lunes, lo que corresponde con la parte superior del amplio hueco abierto que sirve de soporte. No nos sorprendería que tape el hueco en mayor medida, pero si la señal de fortaleza es buena consideramos difícil que un eventual recorte profundice por debajo de los 10.550-10.600 puntos.