La fase de consolidación lateral bajista que desarrolla la cotización de Indra (IDR.MC) a lo largo de las últimas semanas la vemos como una simple pausa previa a una probable continuidad de la tendencia alcista que define el título desde hace meses.
A corto estamos pendientes del título puesto que su cotización se ha aproximado a la base de lo que podría ser una bandera, que es un clásico patrón de continuidad alcista. Este entorno de soporte de los 11,38 euros podría frenar las caídas y provocar que el título retome su tendencia alcista por lo que si aparece cualquier signo de agotamiento vendedor podría ser una opción de compra agresiva manejando un stop bajo esos 11,38 euros