El alcance de la base del proceso consolidativo que define el Nikkei durante las últimas jornadas ha provocado una reacción al alza que, de momento, se ha mostrado incapaz de superar la resistencia que presenta el Nikkei en los 16.350/16.500 puntos, que es el techo de esa consolidación y por donde discurre la directriz bajista.
En la jornada de hoy el Nikkei ha vuelto a atacar sin éxito esa resistencia, lo cual es un signo de debilidad que sigue invitando a no plantearse una entrada en el mercado nipón que podría buscar en próximas sesiones soportes clave de corto plazo en los 15.650 puntos, cuya cesión abriría la puerta a una vuelta a los mínimos del año.