En la jornada de ayer nos llamó la atención el comportamiento de Indra, que fue capaz de escapar de la presión bajista que se impuso de forma generalizada en las compañías cotizadas. Son muchos los que se preguntan qué es lo que tiene que hacer la curva de precios de Indra para dejar de ser bajista o, para cuando menos, sentar las bases de un rebote en próximas fechas. Pues bien, la respuesta es que la presión compradora debe conseguir que Indra supere al cierre de una sesión resistencias que presenta en los 8,95 euros.