La pérdida del soporte del Dax nos lleva a recortar un poco más, hasta el 40 por ciento nuestra exposición a bolsa. Si no lo hacemos más es porque la tendencia alcista aún no ha puesto su punto y final.
Las caídas de las últimas jornadas no hacen más que reforzar la decisión que tomábamos el pasado 6 de noviembre de recoger parte de los beneficios que acumulaban las estrategias alcistas que abrimos a comienzos de octubre en los principales índices europeos. Lo hacíamos intuyendo las dificultades que podían encontrar las bolsas del Viejo Continente para seguir ganando altura, una vez el DAX 30 había alcanzado el objetivo que buscábamos desde Ecotrader.
Para seguir disminuyendo exposición preferimos esperar a que se fueran perdiendo soportes clave de corto plazo, algo que finalmente ha tenido lugar durante las últimas sesiones. El primero en abrir fuego fue el siempre intuitivo Ibex 35, tras perder el soporte que presentaba a la altura de los 10.250 puntos, y no tuvimos que esperar mucho para ver como el resto de índices europeos imitaban al selectivo español, algo que nos ha invitado desde Ecotrader a seguir reduciendo la exposición a bolsa hasta alcanzar niveles actuales del cuarenta por ciento. En estos niveles de confort estamos pendientes de ver como evoluciona la corrección en las bolsas, que de forma general han entrado en fase de ajuste de las subidas iniciadas a finales de setiembre.
Hablamos de una corrección y no de una reanudación de la tendencia bajista ya que para esto último necesitaríamos que existiera un mayor deterioro del que hemos visto, como el que se daría si el Ibex 35 perdiera los 9.700/9.800 puntos. De hecho, nuestra intención es aprovechar esta corrección para aumentar de nuevo la exposición a bolsa pero solamente lo haremos cuando se den las circunstancias óptimas para ello, algo que de momento no vemos pese a que el Ibex 35 ha alcanzado ya su primer soporte de los 10.000 enteros, donde no nos sorprendería que se formara un rebote.
En el frente de divisas lo más destacable fue ver el intento de rebote en el eurodólar, que vemos como algo muy vulnerable y previo a una caída que muy probablemente lleve al par a buscar la zona de mínimos del año en torno a 1,045 y, de hecho, no descartamos que busque la paridad.