Han sido necesarias alrededor de cinco semanas para que el DAX (DAX.XE) haya logrado finalmente romper el techo del rango lateral que acotaba la consolidación del índice germano, algo que en todo momento les había señalado que parecía que era lo más probable ya que este tipo de laterales suelen resolverse la mayoría de casos a favor de la tendencia previa, en este caso claramente alcista.