Después de un comienzo de sesión en la que pintaban bastos para las bolsas europeas las compras se han ido imponiendo y los índices han cerrado cerca de sus máximos, formando un rebote que seguiré viendo vulnerable mientras no veamos como de forma general se superan los máximos de la semana pasada y se cierran los huecos que se generaron a la baja en la apertura del 24 de febrero, algo que no se logró en el último rebote.