Situación de corto plazo:
Mientras no supere resistencias de 1,20 dólares por euro consideramos que eventuales subidas de corto son vulnerables y previas a una caída que aún podría ir a buscar apoyo a los 1,17/1,1760 e incluso los 1,16 dólares por euro, que es el soporte que no debería de perderse si queremos seguir confiando en un contexto alcista de cara a los próximos meses.
Situación Tendencial:
Con las subidas de los últimos meses se está poniendo en jaque la tendencia bajista que desarrolla el par desde los máximos del año 2008 en la zona de los 1,60 dólares por euro. La cotización del eurodólar (EURUSD) está tratando de sentar las bases de un giro alcista después de haber buscado apoyo en su directriz alcista de largo plazo, visible en escala aritmética y que surge de unir los mínimos del año 1985, del 2000 y de 2017. Desde la misma está formando una subida que está comenzando a superar la directriz bajista que guiaba las caídas durante los últimos años. En próximos meses lo más probable es que veamos al eurodólar buscar la zona de 1,25-1,30 dólares por euro, que son los máximos de 2018 y el techo de un canal de medio plazo. Superando ese rango resistivo ya se podría dar por concluida definitivamente su tendencia bajista de largo plazo y se podría favorecer alzas muy importantes en próximos meses y años.