El rebote que están formando a corto plazo las principales bolsas europeas puede llevarnos a pensar que los alcistas han vuelto a tomar el control del mercado y que el riesgo de asistir a una corrección más amplia ha disminuido drásticamente. Pues siento señalarles que nada más lejos de la realidad ya que este rebote por el momento no nos emociona.
De hecho, que el Eurostoxx 50 haya necesitado catorce jornadas para recuperar la caída que desarrolló en una única sesión del pasado 21 de septiembre es de todo menos un gran signo de fortaleza.