Situación de corto plazo:
A muy corto plazo no habrá ningún signo de debilidad que advierta de una nueva caída en las bolsas europeas mientras el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) no cierre el hueco que abrió el jueves pasado desde los 3.775 puntos, que es el que ayer frenó lo que tiene visos de haber sido una simple pausa en las subidas.
Así las cosas, en próximas sesiones seguimos muy expectantes de ver la evolución que puede tener el Eurostoxx 50 en la zona de altos que marcó el año 2015 en los 3.836 puntos. Entre esta resistencia de los 3.836 y los 3.855 puntos no descartamos que podamos ver una consolidación lateral más amplia, que en ningún caso esperamos que lleve a la principal referencia europea por debajo de soportes clave de 3.600 puntos. De hecho, consideramos que podría conformarse con buscar apoyo a la zona de los 3.700 puntos, que es por donde discurre una directriz alcista de menor pendiente a la que se perdió hace tres semanas. Para que se aleje el riesgo de ver esta consolidación lo que exigimos es que el Eurostoxx 50 logre batir la zona de resistencia de los 3.836-3.855 puntos.
Operativamente, una próxima consolidación la volveríamos a ver como una oportunidad para aumentar exposición a renta variable europea en busca de un contexto alcista que aún podría tener un potencial de subida superior al 10% toda vez es muy difícil e improbable que veamos un techo sostenible en las bolsas del Viejo Continente mientras el DAX 30 (DAX.XE)alemán no alcance su resistencia creciente de largo plazo que discurre por los 15.000 enteros y hasta ahí hay un potencial de algo más del 10% desde niveles actuales.
Situación tendencial:
La tendencia que define el EuroStoxx 50 Total Return (SX5T.ST), que es la versión mejorada del índice tradicional EuroStoxx 50 que contempla la reinversión de los dividendos que reparten periódicamente las empresas que forman parte del índice, logró marcar en noviembre un máximo de todos los tiempos tras conseguir superar los máximos del año 2017. Esto es de todo menos algo bajista, máxime después de superar la resistencia creciente que venía frenando los ascensos durante la última década y que discurría por los 7.700 puntos. Esto permite al índice situarse en subida libre absoluta, que es la situación técnica más alcista que existe.
En próximas semanas favorecemos, consolidaciones lógicas al margen, un contexto alcista hacia objetivos que manejamos en los 15.000 puntos del DAX 30 alemán, que es la tangencia con la resistencia creciente de largo plazo y que se alcanzará antes o después dependiendo de la velocidad y pendiente que tenga la actual subida. Mientras no se alcance este objetivo consideraremos eventuales caídas y consolidaciones como oportunidades para comprar si tienen una exposición a bolsa inferior a la que recomendamos en Ecotrader.