Situación de corto plazo:
Después de que las bolsas europeas fracasaran el martes en su ataque a las zonas de resistencias clave y el miércoles se perdieran soportes significativos, como eran los mínimos de la semana pasada, todo apunta a que los índices europeos han entrado en fase de corrección, que es la que de forma insistente venimos señalando que había que esperar para comprar bolsa.
En la medida que no se superaron resistencias clave, como eran los 3.575-3.600 puntos del Eurostoxx 50 (SX5E.ST), mucho nos tememos que la corrección podría ser más intensa y la fuerte caída del miércoles es un claro reflejo de lo que aún podría estar por venir. No nos sorprendería que las caídas, rebotes al margen, pudieran dirigirse a la zona de mínimos de agosto, perdiendo todo el último rebote que desarrollaron, que es donde consideramos que la ecuación rentabilidad riesgo será muy buena para aumentar de un modo significativo la exposición a bolsa. Los mínimos de agosto se encuentran a un 5,50% de niveles actuales y es ahí donde se encuentra la línea divisoria que separa un contexto potencialmente alcista en próximos meses de uno bajista hacia los mínimos de Navidad.
Situación tendencial:
La tendencia que define el EuroStoxx 50 Total Return (SX5T.ST), que es la versión mejorada del índice tradicional EuroStoxx 50 que contempla la reinversión de los dividendos que reparten periódicamente las empresas que forman parte del índice, logró en julio marcar un máximo de todos los tiempos tras conseguir superar los máximos del año 2017. Esto es de todo menos algo bajista pero para hablar de que ha entrado en subida libre absoluta, que es la situación técnica más alcista que existe, debemos esperar a que logre batir la resistencia creciente que viene frenando los distintos intentos alcistas durante la última década. Por el momento sigue por debajo de ella y no nos sorprendería que la aproximación a la misma pueda provocar una nueva consolidación o corrección, que es la que esperamos para volver a recomendar comprar bolsa europea.