El Eurostoxx 50 consiguió ayer superar los máximos que marcó el pasado viernes, que era el requisito que exigíamos de cara a poder dar cierta fiabilidad al nuevo intento de rebote en las bolsas europeas.
El siguiente paso que haría ganar enteros a la posibilidad de asistir a un rebote sostenible más allá de un par de sesiones es que al otro lado del Atlántico los principales índices estadounidenses logren batir resistencias análogas que también encuentran en los máximos del pasado viernes, para lo cual el Dow Jones Industrial debería batir los 25.095 y el S&P 500 los 2.708 puntos.