Apenas cambios significativos en las bolsas europeas en una sesión en la que lo más destacable ha sido ver como el Eurostoxx 50 no ha sido capaz de batir su directriz bajista de aceleración o de corto plazo, que discurre por los 3.190-3.200 puntos. Su ruptura sería otra evidencia técnica que apuntaría a una cierta fortaleza, como fue el hecho de que los principales índices europeos lograran ayer cerrar el hueco bajista que abrieron hace una semana.