Situación de corto plazo:
Los índices europeos han corregido parte del rebote que se inició en los mínimos intradía del martes, algo que no nos sorprende puesto que en todo momento venimos insistiendo que el riesgo de marejada sigue siendo alto. De hecho, es del todo normal que dentro de la fase de corrección en la que se encuentran las bolsas, veamos distintas fases de caída y rebote, que serían como las olas dentro de la marejada.
Operativamente, después de decidir en la apertura del martes, aprovechando el momento de pánico que se produjo, tomar posiciones en el CAC (PX1.PA) y el Mibtel (I945.IT), ahora somos partidarios de esperar para comprar a que bien se alcancen los mínimos que marcaron los índices europeos el pasado mes de agosto, vigilando especialmente los del DAX 30 (DAX.XE) alemán, o bien se tengan evidencias técnicas que sugieran fortaleza. La primera de ellas solamente la encontraremos si los índices logran cerrar el hueco que generaron a la baja en la jornada del martes, para lo cual el DAX 30 debería conseguir cerrar sobre los 12.687 puntos y el CAC 40 por encima de los 5.285 puntos. Mientras eso no suceda el rebote parecerá poco convincente y podría ser vulnerable. En el chat adjunto puede verse como el DAX 30 alemán todavía no ha alcanzado soportes de 11.870-12.000 puntos, que están a un 3% de niveles actuales.
Situación tendencial:
La tendencia que define la principal referencia europea en el medio/largo plazo es alcista y, de momento, no vemos nada que plantee un agotamiento en la misma por lo que eventuales fases de consolidación las vemos como oportunidades para subirse a esa tendencia alcista. El primer objetivo es buscar que el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) se dirija a los altos del año 2015 en los 3.836 puntos, algo que habilitaría que el Eurostoxx 50 en su versión total return (SX5T.ST) rompa sin género de duda su resistencia creciente de largo plazo, lo cual lo situaría en subida libre absoluta, que es la situación técnica más alcista que existe.