No estamos por la labor de tomar nuevas posiciones en renta variable ante el riesgo de que un rebote sea vulnerable, pero si comenzamos a detectar la ruptura de resistencias clave que adviertan de que ese rebote puede ser amplio y sostenible en el tiempo, no dudaremos en comprar.
Un ejemplo lo encontramos con CaixaBank (CABK.MC). Mientras el banco no logre batir resistencias que presenta en la zona de los 4,10 euros no se alejará el riesgo de seguir viendo una continuidad de los últimos meses. Ahora bien, si consigue superar los 4,10 euros se abriría la puerta a una probable subida que podría llevar a la cotización de CaixaBank a la zona de los 4,40 euros e incluso niveles superiores, algo que trataríamos de aprovechar.