Apenas cambios significativos en el ecuador de una sesión en la que lo más destacable es ver como el DAX 30 alemán está comenzando a presionar la zona de máximos del año que marcó a finales del pasado mes de enero. Esto es algo que invita a ser optimistas y a confiar en que el resto de índices europeos en breve podría asaltar esas resistencias, tales como son los 9.625 puntos de Ibex 35 y los 3.342 puntos de Eurostoxx 50, cuya ruptura abriría la puerta a la reanudación de la tendencia alcista de los últimos meses y permitiría dar por finalizada la consolidación de las últimas semanas.