Los descensos se han vuelto a imponer en las bolsas europeas en una sesión en la que lo más destacable ha sido ver como el DAX 30 alemán se ha mostrado incapaz finalmente de batir los 10.650 puntos, que junto con los 10.705 puntos son las resistencias que venimos recomendando vigilar durante las últimas sesiones puesto que su ruptura abriría la puerta a que pudiéramos dar por concluida la fase de consolidación que define el selectivo germano a lo largo de las últimas semanas.