Situación de corto plazo:
Caídas generalizadas en las bolsas europeas en una sesión en la que lo más destacable fue ver como los principales índices del Viejo Continente consiguieron mantenerse por el momento por encima de los mínimos que marcaron la semana pasada. Ahí se encuentra el primer soporte relevante a corto, de cuyo mantenimiento depende que no tengamos de nuevo evidencias técnicas que sugieran una mayor debilidad y abran la puerta a que los índices puedan ir a buscar los mínimos del mes pasado, donde se encuentran los soportes clave que no deberían de perderse en ningún caso si queremos seguir confiando en mayores alzas en próximas semanas / meses sin pasar antes por ver una recaída a la zona de mínimos del año.
Si las ventas sigan presionando a las bolsas europeas y se pierden los mínimos de la semana pasada, que en el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) se encuentran en los 2.980 puntos, se podría reactivar el riesgo de asistir a un escenario de probable vuelta a los mínimos del año. Esto es algo que ganaría muchos enteros si el Eurostoxx 50 pierde soportes fundamentales en los 2.900/2.860 puntos. Mientras estos soportes se mantengan en pie entendemos que lo más probable es que en próximas semanas el Eurostoxx 50 trate de dirigirse a buscar, cuando menos, la zona de resistencia de los 3.200/3.260 puntos.
A corto plazo los puntos de control alcista son los 2.980 como soporte y los 3.050 como resistencia que debe ser superada para tener de nuevo pistas que apunten hacia un rebote.
Situación tendencial:
El Eurostoxx 50 se encuentra durante los últimos meses desarrollando una fase de corrección que sirve para ajustar parte de las fuertes subidas que tuvieron su inicio en los mínimos de 2011, tras la cual entendemos que podría formarse otro impulso al alza. Estamos a la espera de identificar el suelo de esta corrección para volver a recomendar la toma de posiciones en bolsa europea orientadas a medio/largo plazo y que busquen algo más que un simple rebote por sobreventa como el que se formó a mediados de febrero.
Analíticamente, para que podamos hablar de que una subida es algo más que un rebote por sobreventa y se aleje el riesgo de que pueda volver a imponerse la tendencia bajista de los últimos meses, es preciso que los índices europeos cierren los huecos que abrieron en la primera jornada del año, que en el caso del Eurostoxx 50 se generó a partir de los 3.267 puntos.