Sigue cumpliéndose el guión que planteábamos el pasado día 24 de marzo para el petróleo. Analizábamos el comportamiento del Futuro del West Texas, una vez que en febrero desplegó una potente vela en forma de martillo que sugería cuando menos un freno en las caídas. La superación semanas atrás de los 38,40 dólares alejaba en buena medida los riesgos de ver mayores caídas y plantea la posibilidad de un proceso de reestructuración alcista.