Situación de corto plazo:
Después de las fuertes subidas que hemos visto durante las últimas sesiones es del todo normal que a corto los alcistas necesiten tomarse un respiro, algo que está provocando que los principales índices estadounidenses corrijan parte del último ascenso que nació en los soportes claves en tendencia que fueron alcanzados el martes.
Las subidas de corto han reforzado estos soportes como línea divisoria que separa un contexto alcista de uno potencialmente bajista, dependiendo de si se mantienen en pie o se pierden respectivamente. Hablamos de soportes tan importantes como son los 4.485 puntos del Nasdaq 100, los 17.000/17.140 del Dow Jones Industrial y los 2.000 puntos en el Standard & Poor?s 500. Su cesión sería algo muy negativo para las aspiraciones alcistas y abriría la puerta a un contexto bajista de cara a la recta final del año.
Mientras estos soportes no se pierdan entendemos que no se puede descartar la posibilidad de que los principales índices estadounidenses se dirijan a atacar la zona de altos del año, cuya ruptura los volvería a situar en subida libre absoluta.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definen los principales índices norteamericanos desde el año 2008 / 2009 se mantiene del todo vigente y para que exista un deterioro en sus posibilidades alcistas es preciso que una próxima caída perfore los mínimos que se marcaron en la sesión de pánico del pasado 24 de agosto, que llevó a los índices a alcanzar / aproximarse a zonas de soporte fundamental de medio plazo como son los mínimos del año pasado, que podrían ser la base de una consolidación que tiene como techo la zona de altos del año.