Apenas cambios en una jornada de corte consolidativo en el que lo más destacable ha sido ver como al cierre los principales índices europeos han conseguido recuperar las ligeras caídas que durante la sesión se imponían, lo que ha habilitado que veamos líneas de vela con cuerpos reales blancos, algo que sucede cuando el precio de cierre es superior al de apertura. Esto es un signo de fortaleza que encaja con el escenario que venimos favoreciendo y que defiende la posibilidad de seguir viendo mayores alzas en próximas fechas hasta, cuando menos, la zona de altos del año, que en el caso del IBEX 35 se encuentran en los 11.885 puntos, si bien consideramos que los objetivos a buscar se localizan en los 12.000/12.250 puntos.