A finales de la semana pasada las principales bolsas europeas alcanzaron soportes, como son los 4.175/4.200 puntos del EuroStoxx 50, que son en muchos casos la línea divisoria que separa un contexto consolidativo de uno correctivo, en el que el riesgo sería asistir a una profundización de las caídas hacia los mínimos del pasado mes de marzo, que en el caso del EuroStoxx 50 (SX5P.ST) se localizan en los 3.980/4.000 puntos.